Mensaje de la Presidencia: Marzo 2021
“Si siempre intentas ser normal, nunca sabrás lo increíble que puedes ser”. – Maya Angelou
Mientras celebramos, reconocemos y honramos el Día Internacional de la Mujer (8 de marzo), te invitamos a tomarte un tiempo para reflexionar sobre lo que podría significar honrar lo femenino en estos tiempos y dentro del campo de la formación de coaches.
Cultural y contextualmente, la idea de lo femenino puede variar, y todos los géneros poseen aspectos femeninos en su personalidad y mentalidad. Sin embargo, si deseamos facilitar y catalizar un mundo equitativo y justo, debemos prestar atención a la integración activa de los aspectos femeninos en la formación y en las prácticas de coaching. Esto puede ser una contribución significativa para crear un mayor equilibrio de poder entre géneros, culturas y razas.
Debemos desafiar a nuestros coaches a que examinen sus prejuicios inconscientes de honrar las tradiciones y el pensamiento masculinos como superiores y los que representan los aspectos femeninos como inferiores. Ambos aspectos, el femenino y el masculino, son aspectos distintos de nuestra totalidad y necesitan existir e informar nuestro trabajo de coaching en equilibrio y armonía.
Entonces, cuando pensamos en los aspectos femeninos en la formación de coaches, ¿de qué estamos hablando?
Creemos que los siguientes aspectos de la formación de coaches y del coaching honran y abrazan lo femenino dentro de nosotros y de nuestras comunidades.
- Ayudar a nuestros coaches a acceder a su sabiduría innata de corazón y a su inteligencia somática.
- Desafiar a nuestros coaches a comprender y hacer visible la comunidad en la que existen y los sistemas que perpetúan o promueven.
- Aprender a sostener y alimentar las ideas que aún no han encontrado la relevancia pero que necesitan ser atendidas. Esto puede ser dentro de la práctica del coaching o cómo el coaching necesita servir a los menos favorecidos.
- Aportar luz a nuestra conexión con el planeta y sus necesidades.
- La separación inconsciente o voluntaria o la “alteración” que hacemos para distinguir nuestras propias identidades, rompiendo nuestra lente alrededor de la totalidad en la que existimos.
- Acceder a la sabiduría intuitiva.
- Escuchar las diferencias y desbloquear las energías bloqueadas por el patriarcado.
- Desmantelar nuestro patriarca interior como formadores de coaches. Modelar el liderazgo más allá de los confines del patriarcado.
- Descolonializar la necesidad de urgencia, la adhesión a estándares externos de perfección, la necesidad de ajustarse a los estándares dominantes de lo que es correcto y deseable y las imágenes de éxito.
Como formadores de coaches, algunas preguntas clave en nuestras mentes y corazones son
- ¿Cómo honramos lo femenino en nuestro trabajo?
- ¿Cómo facilitamos la aparición de un equilibrio consciente entre los aspectos masculinos y femeninos?
- ¿Cómo es importante este trabajo para contribuir a la evolución de la formación de coaches?
Como formadores de coaches, recomendamos los siguientes pasos para honrar lo femenino.
- Introducir la exploración y desafiar a los coaches a enfrentarse a sus propios prejuicios inconscientes en torno a los roles e identidades de género, así como a lo que significa tener éxito.
- Examinar el plan de estudios para notar cómo puede perpetuar un sentido de superioridad hacia el pensamiento dominante influenciado por la noción patriarcal de éxito, eficiencia y logro.
- Crear seguridad psicológica para permitir que surjan las diferencias y los comportamientos que encarnan la ralentización, el permiso para emerger, la relación y la construcción de la comunidad.
- Crear un entorno activo para legitimar las diferentes formas de inteligencia como parte de la formación de coaches. Por ejemplo, la inteligencia somática y la inteligencia intuitiva.
- Introducir una perspectiva sistémica y un enfoque en el bienestar de las comunidades como parte esencial de la formación de coaches y del trabajo de coaching.
- Examinar cuidadosamente el desequilibrio entre los aspectos masculinos y femeninos de la formación de coaches y de los programas de estudios. Crear un espacio para la retroalimentación, la disconformidad y el aprendizaje a través de la adaptación.
Les invitamos a participar en este diálogo. Puede que tengan una visión y experiencia diferentes de lo que significa honrar lo femenino dentro de la formación de coaches. Nos alegramos de que su contexto cultural, su experiencia vivida y su sabiduría innata probablemente informen este diálogo de manera diferente. Estamos deseando saber de ello.
Vikram Bhatt, presidente electo, en colaboración con Jodi Sleeper-Triplett, presidenta.